en las experiencias que estamos viviendo cuatro amigos durante nuestras prácticas como profesores. Anécdotas surrealistas, exageradas, re-inventadas y llevadas al extremo. Puede que en ellas se puedan sacar las claves para llegar a ser una verdadera y monstruosa máquina de docencia, quién sabe. Si no me ocurre nada raro, cada sábado iré subiendo un capítulo. Hasta que se me acabe la inspiración. O las ganas. Pero creo que, dadas las circunstancias, hay material para muchas tiras. ¡Disfrutadlo!